Estudiantes volvió a caer en el Estadio Hirschi. Esta vez ante Lanús por 2-0, con un jugador más en cancha y con un equipo que dejo más impresiones malas que buenas.
Nueva derrota en este inicio de 2023 para el equipo conducido por Abel Balbo. Esta vez jugando «menos bien» que en los anteriores partidos y con superioridad numérica en cancha. El técnico no encontró la forma de entrarle al equipo visitante, que se cerró de buena manera defendiendo el resultado. Apeló a varios sistemas tácticos en pocos minutos y todos con un factor común: la pasividad.
Estudiantes nunca logró someter al rival con hasta tres delanteros en cancha y una formación cambiante. Como si fuese la única herramienta y no abundara el buen pie, el equipo apeló a los centros al área, los cuales fueron mal ejecutados en su gran mayoría.
El Pincha no jugó bien y la forma en la que es derrotado es lo que más molesta. Si bien Balbo afirmó que «la idea está clara», no se ven frutos de la misma. Es muy apresurado dudar de un ciclo que recién está comenzando, pero desde las cuatros tribunas se le marcó la cancha al técnico a través del clásico cántico que se expresa cuando las cosas no andan bien y se menciona al «Equipo del Narigón».
Los cambios no fueron la solución
En un mar de dudas, Estudiantes comenzó el partido con un sistema 4-2-2-2, para luego cambiarla a los 3 minutos del complemento a un 3-5-2 con los ingresos de Sosa y Méndez, y retrasando a Jorge Rodríguez. Promediando el segundo tiempo y con un jugador de más, Balbo intentó consolidar un equipo más punzante con el ingreso de Franco Zapiola en lugar de Juan Guasone, formando con un 4-1-3-2.
Sin resultados positivos, el técnico redobló la apuesta y en los minutos finales mandó a la cancha a Mateo Pellegrino en lugar del lateral Eros Mancuso, tratando de conseguir el empate a través de centros. Todo esto se vio impedido por la sólida defensa de Lanús y las buenas intervenciones de su arquero Lucas Acosta.
Balbo arriesgó y termino pagando caro sus errores, ya que en los minutos finales un mal cierre de Jorge Rodríguez y una defensa muy mal parada, dejó mano a mano a Franco Troyansky con Mariano Andújar, quien tras una floja respuesta, permitió que el atacante de la visita estampe el 2-0 definitivo.
Sin tiempo para el descanso hoy vuelve a los entrenamientos
Estudiantes tiene como obligación ganar en el torneo local y por eso a partir de las 17:30 el técnico buscará encontrar el equipo que empiece a encaminarse en el torneo. Este sábado visitará a Godoy Cruz, desde las 19:15.
En principio la vuelta de Leonardo Godoy es un cambio cantado. Luego, tendrá que trabajar en el medio y el ataque, viendo que alternativas tiene. José Sosa y Mauro Méndez seguramente sean tenidos en cuenta para cambiarle la cara a este equipo que aún no despegó.
Ya con poco margen para el error, este fin de semana los dirigidos por Abel Balbo tienen que demostrar que lo sucedido en el día de ayer fue un aprendizaje y un llamado de atención sobre las falencias del equipo. En ese partido se verá si realmente el técnico y sus jugadores tienen la capacidad de demostrar que Estudiantes está para pelear y jugar mucho mejor.